Bienvenido al mundo de los cargadores de Vehículo Eléctrico. Ni todos los cargadores son iguales, ni todos están son compatibles con todos los coches.
De la batería al cargador del coche eléctrico. Tener un coche eléctrico no es tarea fácil a veces.
El V.E. es una solución sostenible pero no exenta de retos a superar todavía. Si antes vivíamos pegados a un cable, ahora también. Más bien a varios y con soluciones, todavía, poco desarrolladas. Aunque confiamos en que todo se andará dada la velocidad a la que se está transformando el mundo estos últimos años.
Según el informe “Radiografía de un usuario de vehículo eléctrico” realizado en España por Electromaps (compañía de servicios de movilidad eléctrica) hay que resaltar que la mayoría de los usuarios recargan sus vehículos en carga lenta, y muy pocos usuarios usan la carga rápida de forma constante.
A la pregunta de si creen que en España hay suficientes puntos de recarga, la respuesta mayoritaria es que no. Un 84,4% de los encuestados cree que son necesarios más puntos de recarga. La buena noticia es que muchos de ellos, un 85,5% volvería a comprar el mismo vehículo que actualmente conduce.
Mucho leemos de las baterías de móviles y de los cargadores universales para dispositivos electrónicos, pero poco se escribe sobre los cargadores universales de los vehículos eléctricos. Y es que no podemos evitar comparar un “teléfono inteligente” a un coche eléctrico.
Véase las similitudes. Porque la batería de nuestro “smartphone” dura lo justo para hacer un viaje digital en la red social de turno y la autonomía del coche se encuentra en la misma situación, lo justo para hacer un viaje y llegar a destino. Si hablamos de cargadores, exactamente igual. La carga rápida y el cargador universal serán nuestros mejores aliados en ambos casos (una pena que en vehículos eléctricos no estemos tan avanzados).
“La batería de nuestro “smartphone” es como la del coche. Duran lo justo para hacer el viaje digital a la red social que toque o el viaje del mes, al destino de turno.”
Actualmente existen multitud de dispositivos de recarga para vehículo eléctrico y se diferencian entre ellos por:
- La potencia y el tiempo de recarga
- La información que se intercambia con el vehículo que se recarga
- El tipo de cargador
Y es aquí donde viene lo importante: las clases de cargadores en un coche eléctrico y ¡ojo con las potencias!
No todos los coches pueden cargarse a la misma potencia y cada uno de ellos tiene un límite de operación. Si nos pasamos, la avería está asegurada.
Los tipos de cargadores que destacamos para coches eléctricos son los siguientes:
Schuko: diremos que es el de toda la vida. La toma de corriente convencional de cualquier casa, pero con una velocidad de carga especialmente escasa. Potencia e intensidad muy limitada. No está pensado para coches con gran autonomía.
Tipo 1: fue el primer tipo de cargador creado para coches, así que suele ser compatible con los de primera generación. Es el que tiene forma circular y cinco bornes. Es el estándar japonés, aunque también funciona en marcas estadounidenses y europeas. El proceso de carga completo durará unas 8 horas aproximadamente y opera hasta 7,4 kW.
Tipo 2 o Mennekes: es el más habitual en Europa. Tiene forma achatada en la parte superior y cuenta con siete bornes. Puede funcionar con cargas monofásicas o trifásicas (varia la intensidad) y puede llegar hasta los 44 kW de potencia.
Combinado CCS: se han convertido en el nuevo estándar en toda Europa. Está propuesto para ser la solución universal porque permite tanto la carga rápida como lenta, en continua y alterna con la misma toma. Puede llegar a 100 kW de potencia
ChadeMo: se encuentra en prácticamente la mitad de las estaciones de carga rápida de todo el mundo, siendo una de las mejores opciones. Es redondo, dispone de 10 bornes, puede operar con corriente continua y soporta hasta 65 kW.
Para la recarga, como bien sabemos, no solo existen las electrolineras también la recarga en casa. ¡Y es que propuestas no faltan para mejorar la infraestructuras y proponer nuevos modelos de negocio!
Una que no queremos olvidar y aquí rescatamos, es la que propuso Renault unos años atrás. Desarrolló en Suecia una plataforma de recarga, llamada ElBnb. El objetivo a largo plazo era crear un cambio en la sociedad a la hora de utilizar los diferentes puntos de recarga y poder mejorar la infraestructura de estos en los diferentes países. A través de una página web, los usuarios que dispongan de un cargador en su casa para coche eléctrico, podrían registrase en la web de ElBnb y mediante previo acuerdo con los otros usuarios que quieran recargar su coche, se establecerá el tiempo de recarga (horas, días, noches, etc) y cúanto van a cobrar los propietarios del cargador por el servicio.
Dicho esto, los puntos de recarga pueden servir como oportunidad para dinamizar tanto la infraestructura “doméstica” como las áreas urbanas específicas o de servicio en carretera. Y no solo dinamizar, ampliar una infraestructura que todavía es escasa.
Quizás aparezcan nuevos modelos de negocio o nuevas tendencias que rompan con todo lo preestablecido. Quizás el futuro nos sorprenda con un giro de rumbo o quizás no haya giro, quizás algo totalmente inesperado nos sorprenderá. A nosotros nos gusta pensar más allá y como decía Henry Ford:
“Si le hubiera preguntado a la gente qué querían, habrían dicho caballos más rápidos.”